Castor&Pollux (parte 2): del Guide d'Ayas al Quintino Sella, pasando por el Pollux (4.092 m) y el Castor (4.223 m)

El plan para hoy es hacer las dos cimas y dormir en el refugio Quintino Sella, pero si no nos dan las fuerzas o la meteo es mala, volveríamos a St. Jacques por el mismo camino por el que subimos ayer.



5 Agosto 2019

Desayunamos a las 4 y a las 5:15 ya estamos preparados para salir. Nos encordamos y nos ponemos los crampones en la misma terraza del refugio, porque el glaciar empieza a unos 10 metros por detrás del edificio.





"Plain talking (plain talking)
Take us so far (take us so far)"

Amanecer gris y sin frío. Hay muy buena huella y pocas grietas.



"Broken down cars (broken down cars)
Like strung-out old stars (like strung-out old stars)"

Todo el primer turno de desayuno camino del Castor.



Y un par de cordadas que se desvían al Pollux.



Vistazo atrás.



Aquí ya nos hemos desviado de la huella que va al Castor y estamos atravesando el primer tramo de hielo del día.



"Plain talking (plain talking)
Served us so well (served us so well)"



Para ir al Pollux cruzaremos la rimaya (bastante cerrada) y tomaremos una diagonal a derechas para montarnos en la arista de roca (arista SW). Por delante, una cordada de 2 remontando unas palas de hielo que llevan directamente a la zona de las cadenas. Parecía bastante incómodo subir por donde iban ellos.



Rayos de luz sobre la Roccia Nera. Quitaremos crampones en el hombro, para comenzar las trepadas de roca.



"Travelled through hell (travelled trough hell)
We know how it felt (we know how it felt)"

Terreno roto en general, con algo de sendero. Similar a la normal del Midi d'Ossau, por decir algo.



Rubén saliendo de un paso de IIº/II+.



"Lift me up, lift me up
Higher now up now"

Llegamos al tramo de cadenas: un primer muro liso, seguido de una canal con paso atlético final.



"Lift me up, lift me up
Higher now up now"

Y después, un segundo muro vertical. Francesco Ratti y sus clientes ya están bajando de la cima y van camino de Cervinia. ¡Qué bien trabajan éstos guías alpinos! Rápidos y eficaces con el manejo de la cuerda.



Mientras tanto, hora punta en el Castor.



"Plain talking (plain talking)
Making us bold (making us bold)"

Una Madonna corona el tramo de cadenas. Y detrás de Gabi, el tramo de arista nevada que lleva a la cima del Pollux. Pasamos a crampones de nuevo.



"So strung out and cold (so strung out and cold)
Feeling so old (feeling so old)"

En la arista sopla bastante viento y llegamos a la cima del Pollux pelaos de frío.



Ni idea de hacer selfies. Rubén, Maica, Gabi y yo en el Pollux (4.092 m).



La arista final da bastante más miedo de bajada que de subida. Cuerda corta y cuidadín.



Al llegar a las cadenas, tenemos un ligero pifostio con un par de grupos que están subiendo. Los guías trabajan muy bien, pero también pueden ser muy maleducados. Si son suizos es más fácil que te toque alguno de éstos. Hay dos líneas de cadenas equipadas para aligerar el tráfico. Resulta que al primer guía le parece mal que bajemos por la de la derecha, nos pasamos a la línea de la izquierda y es entonces cuando al segundo guía le parece mal que bajemos por la línea de la izquierda. Se lo diremos en alemán: "irsen a la mierdensen".



Gabi al final de las cadenas.



Y aquí en uno de los destrepes de IIº que vienen después.



Llegando a la rimaya se pone a nevar.



Pero dura poco y decidimos continuar hacia el Castor. No dan tormentas para hoy y vamos bien de fuerzas.



Por delante toda la pala W del Castor, unos 400 metros de desnivel.



Por detrás, Rubén y Maica.



Nos vamos acercando a la rimaya del Castor. La huella va sorteando grietas y pasando por algunos tramos donde asoma el hielo, pero en general, se sube muy cómodamente.





Últimos metros para llegar a la rimaya y hacer un largo en estático.



La rimaya está bastante cerrada y tiene buena huella. Asoma algo de hielo y se va mejor con un piolet técnico, al menos para el primero de cordada. Salió un largo de casi 30 metros a 50º donde metimos 3 tornillos.



Terminando el largo. Hay una reunión con un par de cordinos: uno pillado a un abalakov y el otro no supe muy bien a qué. Se puede reforzar con algún tornillo de hielo. Detrás la afilada arista W del Castor, que tendremos que subir en un rato.



Maica llegando.



Y también Rubén.



De la afilada arista no hay fotos, bastante teníamos con pisar bien y mantener el equilibrio. Muy muy estrecha y con bastante pendiente. Pasamos en cuerda corta, aguantando la respiración.

En la foto, Rubén y Maica llegando a la cima.



Ambientazo alpino, en un día de nubes que vienen y van.



Otra vez, ni idea de hacer selfies. Rubén, Maica, Gabi y yo en el Castor (4.221 m).



No hay muchas vistas y no tardamos en irnos hacia el Quintino Sella, por la "normal" del Castor. Alguna arista afilada, pero no tanto como la que hemos recorrido a la subida.



Vistazo atrás, hacia la cima.



Terreno cómodo durante unos minutos...



...y una última arista afilada y helada, para llegar al gran plateau glaciar.



El glaciar del Felik lo pillamos con muy pocas grietas, hielo negro y niebla espesa. Hay tanta huella que no nos hace falta enchufar el GPS.



Ya asoma el Quintino Sella.



Estratégicamente colocado justo al borde del glaciar, igual que el refugio Guide d'Ayas.



Entramos a fichar, elegimos entre pasta o sopa para cenar, dejamos los trastos en una habitación común enorme y salimos a pasar la tarde por los alrededores.



La meteo no era la mejor, pero ya vimos algo de fauna: Íbice alpino.



Y un raro ejemplar de capra hispánica.



Rayos de sol entrando al Valle de Ayas. Junto a esa morrena ascendimos ayer.



A cenar, hoy estamos en el segundo turno (20:00), no como ayer que cenamos a las 18:30. El menú, el mismo que ayer, macarrones con pesto y algo de carne de segundo. Y todo con platos, vasos y cubiertos de plástico. Poco ecológico, ¿no?



Última salida para ver anochecer y nos vamos a dormir.



Preciosa travesía alpina, pasando por dos cuatromiles entretenidos. Tanto el Pollux por las cadenas, como la arista W del Castor se catalogan como PD. Según el año la rimaya puede dar algunos problemas si está muy abierta o aflora mucho hielo. Nosotros fuimos bien con una cuerda de 30m, 3 tornillos por cordada, 1 piolet por persona, algunos mosquetones ligeros para asegurar en las cadenas y material de rescate glaciar. No vale la pena llevar nada para asegurar en roca (ni friends, ni empotradores). Para los refugios, os vale con un saco sábana.

Al día siguiente, cerraremos el círculo bajando del Quintino Sella hasta St. Jacques, pero eso irá en otro capítulo.