Ya llevábamos unos años con el runrún de hacer una travesía alpina con esquís. Entre la pandemia y aquel gran viaje a Lyngen, el plan había quedado aparcado, hasta ésta primavera.
Seguramente la Chamonix-Zermatt sea la más codiciada y conocida, pero lo de empezar en un sitio y acabar en otro complica la logística y además, no es para nada técnicamente sencilla. Una cordillera tan grande como los Alpes, tiene travesías buenas de esquís casi en cualquier rincón.
Nuestro gran amigo Vicent ha recorrido muchas de ellas y se ha encargado de organizar las reservas de los refus y juntar un grupete de 8 personas en el que no van a faltar las risas y el buen hacer en la montaña. La elegida es la famosa travesía de la Silvretta, ideal como toma de contacto con éste tipo de viajes. Collados sencillos, cimas opcionales, glaciares con pocas grietas (nos vale con un pequeño kit de rescate y cuerda de 30m) y varias posibilidades de escape en caso de necesitarlas.
Abril 2022
Vamos al lío. La primera foto es un "parecía que sí, pero no".
A puntito de cerrar los maleteros de los coches, pensando que por fin habíamos aparcado en un lugar gratuito, 18h después de lo previsto, ignorantes de que nos vigilaba un señor en pijama.
Resulta que el día anterior, entre aterrizar en Bérgamo, hacer 5h30min de coche hasta Ischgl e intentar aparcar, se nos hizo demasiado tarde como para coger los telehuevos al Piz Val Gronda y bajar a cenar al Heildelberger Hütte. A veces, patinamos con la logística y la cagamos.
Total, que nos tocó cancelar la noche en el Heildelberger Hütte (se cobran una parte de la reserva), buscar un alojamiento improvisado por Landeck y volver a intentarlo a la mañana siguiente.
La mañana siguiente. Aparcamos en Ebene y cuando
estamos listos para cargar las mochilas y subirnos al bus que nos lleva a Ischgl, sale un señor
en pijama y con la taza de café en la mano y nos dice que todo eso es
suyo y que nos olvidemos de aparcar (a no ser que le paguemos 5 eureles
por día y por coche). Volvemos a ponernos las zapatillas y nos vamos en
coche valle arriba, a probar suerte en Galtür, a un solar con pinta de ser gratuito. Y
de ahí en bus a Ischgl a pagar 60 eureles por subir al Piz Val Gronda en
telehuevo. No hay forfait sólo de ida, ni pase de ski-touring, ni
regateos que valgan. Cómo se las gastan los austríacos!
Mapa de pistas de Ischgl, vamos arriba del todo, al Piz Val Gronda, cogiendo varios telesillas y telehuevos. El último cierra a las 15:30, ojo si vamos pensando en subir en horario de tarde, que podéis quedaros "en tierra" y acabar discutiendo con un señor en pijama.
Mapita del primer día de nuestra Silvretta.
Música para ambientar la penitencia que teníamos por delante:
He hecho muchas cosas que no tienen ningún perdón,
Como dar veneno a tus gatos,
Ser amigo del hombre del saco,
Y además no doy la talla al hacerte el amor."
Entre que no hemos salido con los esquís este invierno, el peso de la mochila y los grandes calores alpinos que tenemos hoy, pillamos una buena rosca general, con rotura de correa de distribución y junta de la trócola.
Es un poco tarde, han construido cosas allí,
Han quitado todas las playas,
Hay peajes en las montañas,
Y además no doy la talla al hacerte el amor."
La subida al collado es un infierno de ritmo penoso. Por lo menos no nos hemos perdido y el resto del grupo nos espera arriba con una sonrisa.
Zapatos de plomo, no sabes vivir bajo el mar.
Y ahora mi vida es tan aburrida,
Podría haber sido tu salvavidas,
Y además no doy la talla al hacerte el amor."
Ya bajando hacia la vertiente del Jamtalhütte.
Los del refu tampoco dan la talla.
"Arresulta" que te sientan a cenar con malas caras y tono desafiante a las 17:30, te sirven el primer plato sobre las 18:20, el segundo a las 19:30 y el postre sobre las 20:00. Lamentable gestión del refugio, parece que sólo buscan que te infles a birras de medio litro, a 5€ la birra. Ah, y las chanclas también de pago.
Ya en el glaciar, nos metemos en la niebla y comienza a soplar viento y nevar.
Antes de llegar al collado, sobre los 2.900m, nos damos la vuelta.
Hoy en la cena se han dado algo más de vidilla, pero puedes ducharte o hacer una siesta entre plato y plato. El segundo plato lo bautizamos como "pienso para humanoides" y será recordado durante mucho tiempo.
Éstos primeros días de la Silvretta no han ido muy allá. Entre el problema logístico de la primera tarde, los calores del primer día y la mala meteo del segundo, no hemos dado la talla. Al menos, por delante pintan jornadas de buena meteo y amaneceres fríos. Queda lo mejor de la Silvretta por delante. No cambien de canal.
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